Sumario

--> Ley [COMUNIDAD VALENCIANA] 4/2005, 17 junio, derogada por la letra e) del apartado 1 de la disposici髇 derogatoria 鷑ica de la Ley [COMUNIDAD VALENCIANA] 10/2014, 29 diciembre, de la Generalitat, de Salud de la Comunitat Valenciana (獶.O.C.V.� 31 diciembre), el 1 de enero de 2015.

Sea notorio y manifiesto a todos los ciudadanos, que las Cortes Valencianas han aprobado, y yo, de acuerdo con lo establecido por la Constituci髇 y el Estatuto de Autonom韆, en nombre del Rey, promulgo la siguiente ley:

PRE罬BULO

I

El derecho a la protecci髇 de la salud viene reconocido por el art韈ulo 43 de la Constituci髇 espa駉la, art韈ulo que correlativamente impone a los poderes p鷅licos el deber de organizar y tutelar la salud p鷅lica a trav閟 de las medidas preventivas y de las prestaciones y servicios necesarios.

La salud constituye, por tanto, un derecho esencial de la dignidad de la persona y, como tal, s髄o a trav閟 de su satisfacci髇 individual y colectiva puede materializarse la igualdad sustancial entre los individuos y los grupos, que la sociedad y la Constituci髇 espa駉la demandan.

A los efectos de esta ley, se define la salud p鷅lica como el esfuerzo organizado por la sociedad para proteger y promover la salud de las personas y para prevenir la enfermedad mediante acciones colectivas. Este concepto es el resultado de la evoluci髇 hist髍ica de la sanidad, que se ha ido desarrollando y modificando para dotar a la comunidad del m醲imo nivel de salud.

La salud p鷅lica actual tiene en Espa馻 sus or韌enes en la Instrucci髇 General de Sanidad, aprobada por Real Decreto de 12 de enero de 1904, que concret� en el 醡bito jur韉ico la figura del inspector de sanidad en sus tres niveles territoriales: general, provincial y municipal.

La inspecci髇 sanitaria ten韆 entre sus obligaciones vigilar el estado de la salud de la poblaci髇 mediante la vigilancia y la profilaxis de las enfermedades infecciosas, la salubridad urbana, la higiene alimentaria, el control de las vacunaciones y la elaboraci髇 de las estad韘ticas sanitarias. Un hito esencial para la dotaci髇 de profesionales adecuados a las nuevas actividades sanitarias fue la creaci髇, mediante Real Decreto de 9 de diciembre de 1924, de la Escuela Nacional de Sanidad.

Poco despu閟, para la ordenaci髇 de los diferentes 醡bitos territoriales de la sanidad, se promulgaron el Reglamento de Sanidad Municipal, mediante Real Decreto-Ley de 9 de febrero de 1925, que cre� el Cuerpo de Inspectores Municipales de Sanidad, y el Reglamento de Sanidad Provincial, aprobado por Real Decreto-Ley de 20 de octubre de 1925, que origin� los institutos provinciales de higiene. Todo ello enmarca la etapa de consolidaci髇 de la sanidad espa駉la moderna.

El 25 de noviembre de 1944 se promulg� la Ley de Bases de Sanidad Nacional, cuya aplicaci髇, m醩 all� de sus innovaciones y limitaciones, se encontr� con la progresiva creaci髇 de un sistema asistencial, el Seguro Obligatorio de Enfermedad, surgido de la Ley de 14 de diciembre de 1942. Con el desarrollo de los sistemas de protecci髇 social que garantizan progresivamente el acceso a servicios sanitarios para el conjunto de la poblaci髇, el protagonismo sanitario se fue desplazando hacia una acci髇 m醩 asistencial, con predominio del modelo curativo e individual basado en la atenci髇 m閐ica al ciudadano enfermo.

Con las grandes l韓eas que traza la Constituci髇 espa駉la de 1978, y que han sido desarrolladas en la Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad, se inicia la 鷏tima reforma del sistema sanitario espa駉l, con una importancia creciente de la atenci髇 primaria como eje del Sistema Nacional de Salud, incluyendo numerosas actividades preventivas en los servicios de atenci髇 primaria.

La presente ley se adecua al modelo del Sistema Nacional de Salud y, en concreto, a lo dispuesto en la Ley 16/2003, de 28 de mayo, de Cohesi髇 y Calidad del Sistema Nacional de Salud, cuyo art韈ulo 11 contiene las prestaciones de salud p鷅lica, y que se refiere a la salud p鷅lica en el cap韙ulo VIII.

En cuanto a la Generalitat, debemos rese馻r los antecedentes con posterioridad al proceso de transferencia de las competencias en materia de sanidad. La referencia legal m醩 inmediata es el Decreto 42/1986, de 21 de marzo, del Consell de la Generalitat, por el que se define y estructura la atenci髇 primaria de la salud en la Comunidad Valenciana. En esta norma se crearon los centros de salud comunitaria y se delimitaron sus funciones, lo que represent� un paso importante en la consolidaci髇 de un modelo de salud p鷅lica, en consonancia con la Ley General de Sanidad, y que ha sido el germen de la actual estructura descentralizada de salud p鷅lica.

Un marco normativo propio de gran importancia es la Ley 3/2003, de 6 de febrero, de la Generalitat, de Ordenaci髇 Sanitaria de la Comunidad Valenciana, en la que se establece la organizaci髇 de los servicios sanitarios p鷅licos, al tiempo que se define el Plan de Salud de la Comunidad Valenciana como el instrumento estrat間ico de planificaci髇 y programaci髇 del sistema sanitario valenciano, siendo la expresi髇 de la pol韙ica de salud de la Comunidad Valenciana que, l骻icamente, va a determinar la actuaci髇 en salud p鷅lica.

Por otra parte hay que tener presente, a la hora de establecer unas bases de futuro en la gesti髇 y acci髇 de la salud p鷅lica, el marco y directrices definidos en la Comunidad Europea. El Tratado de la Uni髇 Europea dio un importante impulso a la salud p鷅lica al introducir en el Tratado Constitutivo de la Comunidad Europea un art韈ulo espec韋ico, el art韈ulo 129, hoy art韈ulo 152 tras la redacci髇 dada por el Tratado de Amsterdam, dedicado a la salud p鷅lica. Sobre la base de esta pol韙ica, se han publicado distintas decisiones adoptadas por el Parlamento Europeo que han configurado programas de salud p鷅lica para diferentes per韔dos y que, por tanto, constituyen un referente de gran importancia para establecer la pol韙ica en salud p鷅lica de la Comunidad Valenciana.

La salud p鷅lica concentra su actividad en la vigilancia, planificaci髇, prevenci髇 y protecci髇 de la salud. Para todo ello, debe orientar su acci髇 en dos grandes 醨eas. De una parte, dotarse de un sistema de informaci髇, vinculado a la identificaci髇 de las necesidades, la planificaci髇 y la evaluaci髇 de los servicios desde una perspectiva de salud y la detecci髇 de segmentos de poblaci髇 mal cubiertos o sin acceso real a los servicios, permitiendo que la informaci髇 sea la base de la correcta toma de decisiones. De otra parte, desarrollar las intervenciones en el 醡bito comunitario, vinculadas a la prestaci髇 de servicios o al desarrollo de programas que pueden realizarse directamente desde los servicios de salud p鷅lica, desde otras estructuras o mediante una combinaci髇 de ambas opciones.

Esta ley tiene presente que la promoci髇 de la salud es una estrategia fundamental para ganar salud, teniendo en cuenta que los factores transnacionales, el comercio internacional, las tecnolog韆s de comunicaci髇 y la diversidad cultural son los nuevos retos a los que hay que dar respuesta y que afectan al conjunto de la acci髇 en salud p鷅lica. Todo ello debido a la creciente orientaci髇 hacia los resultados de salud, que confirman la prioridad dada a la inversi髇 en los determinantes de la salud potencialmente modificables.

II

Encuadrada la competencia de la Generalitat en el Estatuto de Autonom韆 de la Comunidad Valenciana, art韈ulos 31 y 38, as� como en el art韈ulo 58 que permite a la Generalitat constituir entidades y organismos y crear un sector p鷅lico propio, y en la Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad, la presente ley configura un nuevo marco para el ejercicio de la salud p鷅lica, en un intento de dar la respuesta m醩 eficiente posible a las necesidades que se plantean y al contexto que se ha descrito, mediante las nuevas estructuras de gesti髇 en salud p鷅lica.

El t韙ulo I de esta ley contempla el objeto de la misma y define el concepto de salud p鷅lica.

En el t韙ulo II se expone la Cartera de Servicios de Salud P鷅lica. Desde el punto de vista de la gesti髇 sanitaria, y con el objetivo de clarificar los servicios que se ofrecen a la poblaci髇, es necesario definir la oferta de servicios de salud p鷅lica. Una cuesti髇 que va a adquirir gran trascendencia es la incorporaci髇 y desarrollo de la sanidad ambiental al 醡bito sanitario valenciano, lo que, junto con las competencias ya asumidas, supondr� una actuaci髇 m醩 eficaz en salud p鷅lica.

La Cartera de Servicios de Salud P鷅lica supone establecer las obligaciones de las distintas entidades proveedoras de servicios, normalizar sus actividades y facilitar su evaluaci髇. En definitiva, conlleva la expresi髇 de la salud p鷅lica al servicio del ciudadano, as� como la mejora clara de la gesti髇 en un entorno de equidad.

En el t韙ulo III se delimitan las competencias en salud p鷅lica de la administraci髇 auton髆ica y de los ayuntamientos, de acuerdo al marco legal vigente. Todo ello basado en un contexto de cooperaci髇 interadministrativa para la mejor delimitaci髇 de los 醡bitos de responsabilidad que supongan, en definitiva, la creaci髇 de espacios de colaboraci髇.

El t韙ulo IV propone, con la creaci髇 de la Entidad Valenciana para la Acci髇 en Salud P鷅lica, una mayor implicaci髇 institucional, especialmente con la administraci髇 local, la creaci髇 de mecanismos de participaci髇 y coordinaci髇, una respuesta m醩 eficiente ante las distintas situaciones que se generen y un marco que permita la mejor gesti髇 de los recursos humanos y materiales.

Se crea asimismo una Oficina de Informaci髇 y Comunicaci髇 en Salud P鷅lica, con la finalidad de obtener un mayor rendimiento en el tratamiento de la informaci髇 normalizada, as� como adaptar sus mecanismos ante la aparici髇 de las posibles crisis que generen altos niveles de preocupaci髇 en la poblaci髇.

En el t韙ulo V se crea la Agencia Valenciana de Seguridad Alimentaria.

El desarrollo sociocultural y econ髆ico de la Comunidad Valenciana ha supuesto un aumento considerable de las exigencias dentro del campo de la higiene alimentaria y la salud ambiental, que se configuran como 醨eas de car醕ter intersectorial cada vez m醩 importantes y progresivamente m醩 diferenciadas del sistema sanitario asistencial. Los principios contenidos en el Libro Blanco sobre Seguridad Alimentaria, publicado a ra韟 de la propuesta de la Comisi髇 Europea de 1999, aconsejan un tratamiento organizativo singular en esta materia, que cristaliza con la creaci髇 de la Agencia Valenciana de Seguridad Alimentaria. Esta entidad, con personalidad jur韉ica propia, debe aunar esfuerzos bajo una triple perspectiva de evaluaci髇, gesti髇 y comunicaci髇 de riesgos. En definitiva, se pretende reforzar la estructura que sustenta el Plan de Seguridad Alimentaria.

En el t韙ulo VI se crea el Centro Superior de Investigaci髇 en Salud P鷅lica, para dar respuesta a la necesidad de profundizar en determinadas parcelas del conocimiento cient韋ico en el amplio 醡bito de la salud p鷅lica. A su vez, va a suponer una mayor capacidad tecnol骻ica y una relaci髇 directa con las l韓eas internacionales de investigaci髇 en los aspectos relacionados con la salud p鷅lica. Se define su marco de funcionamiento con una clara vinculaci髇 a la administraci髇 sanitaria, pretendiendo que la investigaci髇 se oriente a necesidades percibidas por los profesionales en las actividades que se realizan. A su vez, es imprescindible una interrelaci髇 con otras estructuras que se aproximen a las distintas parcelas de investigaci髇, como es el caso de las Universidades, y contando con la necesaria implicaci髇 del sector empresarial.

En el t韙ulo VII se hace referencia al desarrollo y mantenimiento de un Sistema de Informaci髇 en Salud P鷅lica. En 閘 adquieren una gran relevancia las obligaciones de los profesionales sanitarios, as� como las responsabilidades de las distintas instituciones que puedan aportar distintos niveles de informaci髇. Es importante dar respuesta a la necesidad de disponer de un sistema de informaci髇 para el soporte de la decisi髇 vinculado a los niveles de intervenci髇 sobre la poblaci髇. La colaboraci髇 en distintos 醡bitos asistenciales va a aumentar la capacidad de respuesta r醦ida ante riesgos para la salud, permitir� definir las estrategias de intervenci髇, obtener un mayor rendimiento de la informaci髇, as� como, ante determinadas situaciones, conseguir una participaci髇 de los recursos existentes con una ganancia evidente en la eficiencia de la organizaci髇.

En el t韙ulo VIII se aborda una de las principales garant韆s con las que debe contar cualquier sociedad para garantizar la protecci髇 de la salud. La inmediatez de una respuesta ante situaciones excepcionales motiva la adopci髇 de decisiones actuando bajo el principio de precauci髇. Por esta raz髇, y reconociendo el nivel de responsabilidad del ejercicio de la autoridad sanitaria, se especifican sus prerrogativas de intervenci髇 y se clarifican las medidas que se pueden adoptar tanto respecto a establecimientos y empresas como frente a individuos o grupos de personas, en caso de peligro para la salud, de acuerdo a lo dispuesto en la Ley Org醤ica 3/1986, de 14 de abril, de Medidas Especiales en Materia de Salud P鷅lica, y en la Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad.

Por 鷏timo, en el t韙ulo IX se re鷑en todas las infracciones en materia de salud p鷅lica que se encuentran dispersas en distintos marcos normativos, estableciendo las sanciones y los 髍ganos competentes para la imposici髇 de las mismas tanto en el 醡bito local como auton髆ico.