Sumario

--> Ley [COMUNIDAD DE MADRID] 6/2007, 21 diciembre, derogada por la Disposici�n derogatoria �nica de la Ley [COMUNIDAD DE MADRID] 7/2015, 28 diciembre, de Supresi�n del Consejo Consultivo (�B.O.C.M.� 29 diciembre) el 31 de diciembre de 2015. V�ase D [COMUNIDAD DE MADRID] 26/2008, 10 abril, del Consejo de � Gobierno, por el que se aprueba el Reglamento Org�nico del Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid (�B.O.C.M.� 11 abril).-->

La Presidenta de la Comunidad de Madrid.

Hago saber que la Asamblea de Madrid ha aprobado la presente Ley, que yo, en nombre del Rey, promulgo.

PRE�MBULO

I

La administraci�n consultiva goza de una larga tradici�n en Espa�a donde siempre se ha configurado como un elemento fundamental en el proceso de toma de decisiones de nuestras Administraciones p�blicas.

La funci�n consultiva, con independencia de nuevas formas de asesoramiento surgidas en las �ltimas d�cadas como respuesta a las exigencias de una Administraci�n cada vez m�s obligada a adoptar decisiones con una mayor celeridad, ha sido tradicionalmente desempe�ada por �rganos de car�cter colegiado que act�an con independencia, principio este que junto con el de colegialidad sigue hoy manteniendo su plena vigencia como garant�a �ltima del rigor y del acierto de su asesoramiento.

La ayuda prestada por los �rganos consultivos a la Administraci�n actuante tiene por objeto contribuir a la mejora de sus decisiones a las que han de aportar el reposo de la deliberaci�n y la objetividad de una visi�n exenta de la urgencia de la actuaci�n cotidiana.

Los �rganos consultivos no tienen por objeto controlar la actividad de las Administraciones p�blicas sino contribuir a su perfeccionamiento en la fase previa de elaboraci�n de la decisi�n. Pero los �rganos consultivos, en cuanto contribuyen a garantizar la legalidad y el acierto de la actuaci�n administrativa, contribuyen tambi�n a la mejor protecci�n de los derechos de los ciudadanos y a la consolidaci�n de su posici�n jur�dica.

El Estatuto de Autonom�a atribuye a la Comunidad de Madrid en el art�culo 26.1.�.1 la competencia exclusiva en materia de organizaci�n, r�gimen y funcionamiento de sus instituciones de autogobierno, entre las que cabe incluir la creaci�n de �rganos consultivos semejantes al Consejo de Estado, toda vez que esta posibilidad ha quedado plenamente reconocida por la jurisprudencia del Tribunal Constitucional desde la Sentencia 204/1992, de 26 de noviembre.

La Comunidad de Madrid no hab�a creado hasta ahora un �rgano colegiado e independiente como el que, siguiendo el modelo de nuestro Consejo de Estado, han creado casi todas las comunidades aut�nomas. Parece ahora llegado el momento de colmar este vac�o institucional y completar el marco organizativo de nuestra Comunidad mediante la creaci�n de un Consejo Consultivo que con su labor de asesoramiento complete la labor de control desempe�ada por la C�mara de Cuentas y la de participaci�n que lleva a cabo el Consejo Econ�mico y Social.

II

La Ley consta de un t�tulo preliminar, tres t�tulos m�s, tres disposiciones adicionales, una disposici�n transitoria, una disposici�n derogatoria, y tres disposiciones finales.

El t�tulo preliminar regula la naturaleza y r�gimen jur�dico del Consejo Consultivo caracteriz�ndolo como un �rgano de asesoramiento que act�a con autonom�a org�nica y funcional.

El t�tulo I regula los �rganos, la composici�n y estatuto jur�dico de los miembros del Consejo Consultivo. Los Consejeros ser�n de dos categor�as, electivos y permanentes, condici�n esta reservada en exclusiva a los ex Presidentes de la Comunidad de Madrid, como reconocimiento expreso al valor permanente de su experiencia en los asuntos relacionados con la Comunidad de Madrid.

El t�tulo II regula las funciones del Consejo Consultivo estableciendo con claridad y precisi�n sus competencias que, en determinados supuestos, se extienden a la actuaci�n de las corporaciones locales lo que, sin duda, ha de constituir una importante contribuci�n a la actuaci�n de estas.

El t�tulo III regula el funcionamiento del Consejo. En el mismo se regula la forma y el procedimiento para la adopci�n de estos dict�menes as� como los medios personales y materiales de los que ha de estar dotado el Consejo.